En los últimos años, las lavanderías de autoservicio son cada vez más habituales.

La lavandería de autoservicio es un concepto revolucionario de idea de negocio surgido ante la movilización de las nuevas generaciones, que van constantemente en busca de la optimización, tanto de esfuerzos como de tiempo.

Estos establecimientos se adaptan a la perfección a este concepto de optimización. Llevas tu colada a uno de estos locales y en pocos minutos te vas con tu ropa limpia y seca. Con este gesto, son muchos ya los que ahorran tiempo, al no tener que esperar a que la ropa se seque gracias al servicio de secado que ofrecen las lavanderías, y dinero, al no tener que comprar productos como detergentes ni tampoco lavadoras, además del gasto energético que estas conllevan.

Renovarse o morir

Este tipo de negocio ha sabido modernizarse y ya han pasado a la historia aquellas viejas lavanderías que parecían obsoletas. Hoy en día, el cliente de una lavandería de autoservicio cuenta con una tarjeta de cliente en la que puede acumular puntos incluso pagar por el servicio ahorrándose así el pago en efectivo.

Dentro de estas lavanderías, el cliente cuenta con los productos necesarios para llevar a cabo su colada. Además, lo que se puede llegar a lavar en una lavanderías equivale a tres coladas en un hogar medio. Cómo decíamos, ahorro en todos los sentidos.

¿A qué se debe este ‘boom’?

Actualmente, en España existen cerca de 1.200 lavanderías de autoservicio. Se trata de un número considerable si tenemos en cuenta que hace 4 años tan solo llegaba a la mitad. Los jóvenes emprendedores han encontrado en este tipo de lavanderías una idea negocio perfecta. Ni la inversión inicial ni los gastos de gestión son demasiado elevados. En cuanto a los conocimientos necesarios, basta con conocer el mantenimiento de la maquinaria y los recursos utilizados.

De esta manera, estamos ante la implantación de un modelo de negocio proveniente de países como Estados Unidos o Inglaterra y que sin duda está teniendo una gran aceptación. Estaremos atentos porque parece que las lavanderías de autoservicio han llegado para quedarse.

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